Bienvenidos a la residencia en sasco hill

 


Queremos llevarlo a través de exuberantes copiosos rododendros y más alla de la intricada reja forjada de hierro hasta una asombrosa propiedad.

 

A lo largo de un grácil camino de losas bluestone al margen de setos podados y trepantes especies de enredaderas, uno se transporta a un mundo de belleza increíble. Como la escultura icónica que emerge sublime del patio de granito rosa, esta residencia sumamente serena y escultural es un clásico contemporáneo de grandeza monumental declarando una habilidad artística lírica y una levedad del ser que desafían la gravedad.

 

Este hogar fundamentalmente único es un diseño del renombrado arquitecto Roger Ferris y se inspira en el pasado señorial inglés. Deriva su inspiración de las señoriales mansiones inglesas como aquellas creadas por el legendario Edwin Lutyens, famoso y prolífico arquitecto británico. Aclamado por sus adaptaciones imaginativas del estilo tradicional de época, esta extraordinaria interpretación encarna una toma inteligente, sofisticada y contemporánea de cómo vivir el aquí y el ahora.

 

La genialidad del refinado diseño de la casa es la modesta forma en la cual sus 2323 metros cuadrados (25 000 pies cuadrados) se destilan en seis niveles de proporciones perfectas, habitaciones cálidas y acogedoras. Cada cual ricamente decorada con carpintería majestuosa y los más hermosos elementos fijos y acabados. El resultado glorioso es una atrayente casa familiar que con naturalidad y elegancia está a la altura de cualquier ocasión, ya sea una cena para dos o una extravagante fiesta para doscientas personas. Comodidades y pertrechos aparecen a una escala increíble.  Y una casa de huéspedes preciosa y cómoda se encuentra lista para extender la invitación.

 

La entrada es a través de un imponente pórtico de dos pisos de piedra caliza abrazado por un altísimo espacio que es la galería con su piso de mármol mermelada. Le sigue un primer encuentro fantástico con una escalera circular forjada en hierro que parece flotar, reminiscencia de la más astuta ilusión óptica de M.C. Escher. Al igual que con muchos de los elementos de diseño extraordinario de la casa, el impacto es edificante e inmensamente impresionante.

 

A partir de este punto, todas las mayores habitaciones emanan en una progresión lógica de agujas de reloj: sala de estar, biblioteca, área familiar, cocina, y comedor. Fabulosas ventanas del suelo al techo y puertas francesas se abren orientadas para aprovechar al máximo las espectaculares vistas que comienzan con el campo de golf del Country Club Fairfield, se extienden hacia el pintoresco puerto marítimo del pueblo Southport Village y al brillante estuario Long Island Sound, y se alarga hasta el otro lado de las aguas para llegar al distintivo horizonte de Manhattan.

 

Se llega a la parte superior de la casa por la escalera flotante y un elevador. Ahí es donde se ubica la Master Suite – el pináculo de la perfección. El grácil dormitorio con techos abovedados se abre a una sala de estar con una chimenea acogedora. Dos elaboradas alas alojan las salas de baño para damas y caballeros, vestidores, y estudios privados. A 23 metros (75 pies) sobre el nivel del mar, vistas infinitas son capturadas desde cada ventana o se exhiben espectaculares desde las terrazas que trascienden.

 

Directamente debajo de la Master Suite hay seis acogedoras habitaciones para niños y huéspedes. Cada cual con su agradable vista particular y su propio baño privado deliciosabiente cubiertos de piedra o baldosa. Estos cuartos comparten una habitación para juegos multiples y medios que puede usarse para cualquier actividad u ocasión.

 

Hay muchos otros atractivos debajo del nivel principal. Una cabaña con cocina, un complejo baño con sauna y una piscina oval al exterior sobre un aplio patio revestido de piedra caliza. En este nivel también se encuentran un cuarto de ejercicio, oficina, cava, armario de pieles, armario para calzado sucio y cinco cocheras para cualquier tipo de vehículo.

 

Yendo un nivel más abajo se llega a las instalaciones deportivas interiores. ¡Prepárate para practicar squash, golf, basketball, o baile! 

 

El nivel más inferior de la residencia, al igual que sus elevadas contrapartes, está lleno de sorpresas y luz del sol. Rodeando la esquina de un corredor de piedra caliza se dispone el primer encuentro con una piscina interior de 23 metros de largo (75 pies), azulejo italiano, un río azul que fluye a una bóveda de cañón debajo de una vasta extensión de vidrio que es la claraboya.

 

 Como si el espacio interior no fuese suficiente, jardines encantadores y plantas preciadas aguardan afuera. Jugueteando por el paisaje que se expande una vastas extensions de césped cuidado apto para cualquier tipo de juego, manzanas para deliciosas tartas, un jardín de rosas y otro jardín estilo inglés que son un festín para los ojos y el olfato.

 

En la última mirada todo es amor a primera vista. La luz juega constante sobre la piedra caliza italiana y la fachada de ladrillo que exhibe un luminoso devaneo de la sombra del sol siempre cambiante e hipnotizante. Persianas de un delicioso color verde manzana adornan las ventanas, mientras que las puertas francesas engalanadas con marquesinas de alegres rayas invitan las suaves brisas marinas. Una vasta extensión de cielo azul brillante es telón de fondo de ondulantes nubes que desfilan justo al alcance de las abundantes terrazas y balcones. Balaustradas esculpidas con esmero se alinean para saludar.

 

 

Es, de hecho, el hogar de una vida sublime vivida con felicidad exuberante.